La firma electrónica en cifras en nuestro país

A pesar de que la Ley de Comercio Electrónico tiene nueve años de vigencia en nuestro país, no fue sino hasta el año 2008 que el Consejo Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL)  acreditó al Banco Central del Ecuador como la primera Entidad de Certificación y recién desde el 2009 se empezó a masificar el uso de la firma electrónica. Víctor Barrionuevo, encargado del proceso de certificación de firma electrónica en el Banco Central, explica cómo funciona.   

La firma electrónica no es más que el equivalente digital de la firma manuscrita con la misma validez legal. Desde el punto de vista técnico, es un conjunto de datos que se añaden a un archivo digital, y que permiten identificar al firmante a través de su certificado digital.

Según el BCE se han tramitado cerca de 7.000 certificados. De ellos, el 70% provienen del sector público, 28% de personas jurídicas y apenas un 2% de personas naturales. A nivel nacional, la región con mayor número de certificados digitales tramitados es la Sierra con el 79%.

 

 

Víctor Barrionuevo y Xavier Pazos, encargados del proceso de Certificación de firma electrónica en el Banco Central, aseguran que su uso ha tenido un crecimiento importante. Esto, gracias al impulso gubernamental, el uso cada vez mayor de facturación electrónica y el desarrollo de soluciones informáticas.  

Es a partir del año 2009 que aparecieron aplicativos o servicios para el funcionamiento de la firma electrónica. Un ejemplo es el Quipux, el Sistema de Gestión Documental  o el  SPI (Sistema de Pago Interbancario) usado por las instituciones del sistema financiero nacional.

El Quipux es utilizado por todas las entidades de la administración pública central y actualmente por algunas universidades y municipios. Mario Albuja de la Subsecretaría de Informática, asegura que desde el año 2008 que funciona este sistema, se han generado 4 millones de documentos y de esos, 537.143 fueron firmados electrónicamente. A diario se generan 20 mil documentos de los cuales 3 mil son firmados con este sistema.  


¿Cómo puedo obtener la firma electrónica?  

El BCE es la entidad de certificación de información, de derecho público que ofrece servicios de certificación electrónica y actúa como un tercero de confianza ante las personas que validan los documentos firmados electrónicamente. A parte el CONATEL ha acreditado a  dos empresas privadas, SECURITY DATA Y ANF, como entidades de certificación de información.
   
En el caso del BCE, el proceso para obtener la firma electrónica dura aproximadamente una hora, este tiempo depende del interés y agilidad con que el solicitante realice el trámite.. Tanto personas naturales como jurídicas y funcionarios públicos pueden acceder a este servicio y obtener su certificado con su respectivo dispositivo Token.

La solicitud se realiza vía Internet a través de la página del BCE y tiene un costo de 69 dólares más IVA si es la primera vez, o 22 dólares en el caso de una renovación. La validez del certificado digital es de dos años. Los certificados se entregan,  en las ciudades de Quito, Guayaquil y Cuenca; el Banco Central está implementando el esquema de terceros vinculados con otras instituciones públicas y privadas con lo que cubrirá la geografía nacional en corto plazo.

Una vez que registra sus datos personales y ha realizado el pago, el usuario recibe un Token o llave, muy parecido a una memoria USB donde se almacena la clave  privada y la pública y que debe usar cada vez que realice una firma electrónica.

Para utilizar el token debe descargar un driver que está disponible en el portal Web del Banco Central para Windows y Linux (en las versiones soportadas).

Víctor Barrionuevo, encargado del proceso de certificación de firma electrónica en el Banco Central, explica los pasos que se debe seguir para obtener la firma electrónica.

 

En el caso que desee dejar sin validez un certificado digital, puede seguir un Proceso de Revocatoria, que se realiza a través de la página Web del BCE. Ya sea porque le robaron  el dispositivo criptográfico, porque la clave está comprometida, porque cesó como funcionario, por fallecimiento del titular, entre otras.

Mario Albuja, así como los funcionarios del Banco Central, aseguran que el uso masivo de la firma electrónica viene por un cambio cultural de los usuarios.  Reemplazar el proceso manual por uno electrónico con total sustento legal y seguridad, permite el ahorro de papel, de recursos humanos, de costos y tiempo.

La idea es que todos los documentos se conviertan en digitales. Para ello, el BCE apuesta por algunos proyectos que se encuentran en implementación. El primero, el uso de certificados en archivo para masificar la firma electrónica, incluir en su proceso a terceros vinculados, es decir que empresas de otros lugares del país para que actúen como  autoridades de registro, y una reingeniería de la plataforma de seguridad con certificados más robustos y nuevos servicios relacionados como el estampado de tiempo y consultas en línea del estado de certificados digitales OCSP.

Datos interesantes:

–    Desde el 9 de junio de 2011 entró en vigencia la Norma Técnica Ecuatoriana NTE-INEN 2410:2011 en el ámbito de la documentación para Elaboración de Oficios, Oficios Circulares, Memorandos, Memorandos Circulares y Circulares. Puede descargar desde el portal Web del INEN.

–    El Sistema de Gestión Documental QUIPUX fue creado en la Subsecretaría de Informática y se desarrolló en base al sistema colombiano ORFEO.  

–    Para quienes no tienen acceso a una aplicación institucional o privada, existe un portal público, el Sistema para Firma Electrónica de Documentos, desde el cual cualquier usuario puede firmar cualquier tipo de documentos.
 

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